Ya hace unos meses que estuvimos en Angiz Etxea, la elegimos a través de Toprural por las fotos y los buenos comentarios, y no sólo no nos defraudó, si no que superó nuestras expectativas.
Está perfectamente equipada, se nota que está hecha y decorada con gusto y con materiales de primera calidad, algo que no es de extrañar pues fue diseñada como vivienda de sus propietarios, y ¿quién no quiere lo mejor para su casa? El resultado es una casa moderna pero con el necesario encanto rural de la zona, acogedora y cómoda. Los espacios son amplios y cálidos, y sus grandes ventanales permiten disfrutar desde casi cualquier rincón, de las magníficas vistas que ofrece el pueblo y el entorno. En este sentido, destacan las vistas desde la zona de comedor y las que puedes disfrutar sin levantarte de la cama.
De la limpieza y el orden sólo se puede decir que son inmejorables, casi demasiado, pues te da "cosa" dejar algo fuera de su sitio... Y en cuanto al trato, discreto y sencillo, pero atento en todo momento. Por cierto, en la casa puedes encontrar casi más información que en la oficina de turismo, y si algo te falta, Haizea te lo brinda de manera inmediata. Destacar también el precioso y cuidado jardín, en el que, además de poder hacer una barbacoa, puedes relajarte leyendo un buen libro en las cómodas tumbonas con las que está amueblado, así como continuar contemplando el verde y el azul de que está rodeada la casa.
En cuanto al entorno, el pueblo es muy tranquilo y el paisaje te relaja con sólo mirarlo, además existen muchas posibilidades de actividades cerca de allí: Vía verde del Bidasoa, Parque Natural Señorío de Bertiz que es precioso y muy agradable para recorrer andando, etc. Asimismo, se come de muerte por la zona, a nosotros nos gustó especialmente el restaurante Donamaria´ko Benta, en Donamaria, casa del XIX restaurada, con habitac de juegos para los niños, un jardín muy especial y buena relación calidad-precio.
Angiz, una casa para conocer y volver.