La casa es espaciosa y amplia. Está bien situada, en una zona tranquila, pero es necesario tener coche para cualquier desplazamiento (compras, núcleo urbano, playa, etc). Está razonablemente bien equipada aunque se echa de menos un microondas, un lavavajillas de tamaño normal (el que había es de tamaño mini, sirve como mucho para dos o tres personas). Los inodoros tienen un funcionamiento algo limitado porque la casa tiene pozo negro y carece de la canalización adecuada. La casa está pensada para huéspedes alemanes: no hay canales de TV españoles, casi todas las indicaciones están en alemán, etc. El jardín es muy bonito y grande, con barbacoa y zonas de relax, pero estaba algo descuidado (numerosas telarañas).
Al llegar, se nos proporcionó el router wifi, pero se nos indicó que la capacidad estaba limitada a 5GB, lo cual no aparece en la web ni en la comunicación con la propietaria. La agencia local es eficaz (resolvieron algún problema con el agua caliente rápidamente) aunque la persona que nos enseñó la casa apenas hablaba español y nos facilitó demasiadas explicaciones.