La comunicación con los propeitarios fue constante y muy detallada. La casa la estrenamos nosotros, que fuimos con nuestros dos hijos y con dos perros. La casa es simplemene maravillosa, con una chimenea preciosa en el salón-cocina, que hace que la estancia sea super cálida; además, calefacción por radiadores, por si acaso. La cocina totalmente equipada y con mucho espacio para poder cocinar y, además, estar en el salón.
Los dormitorios de la planta superior, fenomenales, tres habitaciones dobles, con dos abños, lo cual, para ir con niños, se agradece muchisimo. Nos dejaron una chocolatina y una botella de agua a cada uno a la entrada, lo cual siempre es un detalle de agradecer.
Las vistas al campo y a la montaña, tanto por la noche, como por la mañana, simplmente espectaculares.
Finalmente, especial mención al trato recibido por los propietarios, simplemente PERFECTO. Atentos, cuidadosos, predispuestos a solucionar cualquer problema o ayudarnos con al chimenea (no teníamos ni idea de cómo encender una).
Casa perfecta para ir a descansar y pasear por el campo y la montaña y recomendable 100%.