La piscina, espectacular pero, el entorno aún más. El porche de la entrada de la casa, un rincón ideal para un desayuno, sobremesa y todos los momentos del día.
La barbacoa, que juego daba…??
La zona de Chil-out, espectacular…buenas charlar que nos hemos echado ahí, con el café o con unas copas.
El resto de la casa, muy cómoda y María, la anfitriona, muy atenta y preocupada por nuestro bienestar. Gracias María y también por ese regalito de bienvenida, producto de tu cosecha ( me hizo recordar el sabor auténtico como hacía tiempo que no lo tenía) y por recomendarnos rincones de Dúrcal para hacer senderismo, de los cuales hemos disfrutado muchísimo. Gracias, gracias! ??