Que decir que no se haya dicho ya, en la encuesta de valoración te quedas corto al dar puntuación, como digo en el título...es como tener una casa en la montaña, un equipamiento total, solo te hace falta tu ropa y comida, todo lo que puedas necesitar lo tienes, y si no, seguro que Sara y Antonio estaran encantados de facilitartelo, no se puede ser mejores anfitriones, la limpieza genial, el estado de mobiliario y demas enseres genial, lastima que fuimos en epoca de lluvias y de escapada cultural, por que el jardin era para disfrutarlo, una zona estupenda para hacer barbacoas y pasar buenas veladas, incluso para darte un baño en la piscina, en fin...no me voy a explayar mucho mas por que me sumo a todas las buenas criticas de los viajeros anteriores que ya han dicho todo lo que se podria decir, solo felicitar a los dueños por ese pedacito de cielo en a tierra.