En primer lugar, destacar la amabilidad y el trato con el que nos atendieron los dueños de la casa al recibirnos. La casa, por otra parte, es enorme y con muchas habitaciones y baños; perfecta para una salida con un grupo de amigos o una familia numerosa. Además, destacar la gran cantidad de complementos de la que dispone, como platos, sartenes, ollas, paellas y cubiertos. El pueblo, también, de gran calidad; porque aunque parezca a primera vista, pequeño y sin nada que hacer, en nuestro caso, en fin de año, que es cuando fuimos nosotros, descubrimos varias actividades y planes que hacer. Siempre es un placer descubrir nuevos sitios tan agradables.